lunes, 12 de agosto de 2019

Sabiduría empresarial...

Para las empresas mexicanas, la información que llega proveniente de las calificadoras acreditadas es muy importante, porque refleja el impacto que en la economía nacional producen las políticas públicas.

En consecuencia, con esa información, toman decisiones porque es razonable interpretar que todas las empresas son establecidas para obtener utilidades; y que bajo ese criterio, lo deseable es obtenerlas operando con un entorno financiero estable.

Cuando la información especializada produce un estado de ánimo de cautela, surge el punto de quiebre: creer o dejar de creer en el discurso gubernamental. Y los empresarios mexicanos se encuentran precisamente ahí. 

Lamentablemente a la opinión de las calificadoras se suma la lectura de los propios informes internos de las empresas, que muestran la inequívoca presencia de una desaceleración.  

Lo que sigue entonces es que los empresarios se reúnan para dialogar e intercambiar opiniones en los organismos que los agrupan y unidos, busquen la manera inteligente de hacerle ver al gobernante que por el bien del país, es necesario revisar y en su caso modificar las actuales políticas públicas gubernamentales.

La inteligencia recomienda revisar quien saldría ganando, si como en los 70s, la iniciativa privada y el gobierno federal se trataran como enemigos.

No es un asunto de antagonismo sectorial; es un asunto en el que se requiere humildad y sabiduría cristiana en ambas partes.

Moisés Abel García Flores.